La expropiación le permitirá al municipio asumir la titularidad de la Bickenbach, cuyo derecho propietario ha sido reivindicado por los descendientes de la última propietaria que habitó en la casa, Felipa Noevia Solano.
El Departamento de Patrimonio Territorial de la Alcaldía recibió la instrucción del Ejecutivo Municipal de preparar la documentación necesaria que respalde la necesidad de expropiar la casa, declarada Patrimonio Cultural Edificado de Cochabamba.
A decir del director del Departamento de Patrimonio Territorial Gustavo Siles la documentación solicitada debe ser remitida en los próximos días al Concejo Municipal, para que trabaje en la elaboración de una ordenanza municipal que resuelva la expropiación del bien inmueble.
El Departamento de Patrimonio Territorial alista informes técnicos, antecedentes legales y los proyectos de refuncionalización de la casa, situada en la calle Huallaparrimachi, a media cuadra de la plazuela de Cala Cala.
Entretanto se prepara la ordenanza, la Alcaldía comenzará las gestiones para fijar el costo que le corresponderá destinar al propietario legal de la Bickenbach.
Siles hizo conocer que el proceso legal para la definición del derecho propietario estableció que su titular es Mario Díaz Rueda, heredero de Felipa Noevia Solano, fallecida en 1995.
Toda vez que Díaz Rueda reside en Colombia, se prevé que la negociación para fijar los términos económicos de la expropiación sean asumidos por su apoderado.
PROYECTOS El Departamento de Patrimonio Territorial maneja dos proyectos para la refuncionalización de la Casa quinta Bickenbach una vez que esté bajo tutela de la Alcaldía.
Uno es instalar en la propiedad una biblioteca interactiva, que permita realizar programas educativos y culturales de nivel universitario, dice Siles.
El otro es crear una escuela municipal de formación técnica, similar a las llamadas “escuelas taller”, en las que se formaría mano de obra calificada en obras civiles y restauración arquitectónica, añade.
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