Las estructuras declaradas patrimonios culturales, no son restauradas porque se encuentran en juicio debido a que gran cantidad de éstos propietarios recibieron el inmueble en herencia, afirma la directora de Patrimonio Cultural y Natural, Ximena Pacheco.
“Generalmente, este problema se da porque varios de los propietarios están en juicio por estos bienes y la propiedad fue pasando de generación en generación e incluso existió un inmueble hasta con 60 dueños” dijo, Pacheco.
Agregó, que los dueños alquilan la casa, pero nadie se hace responsable por el mantenimiento y el riesgo inmediato es que dañe a terceros.
En días pasados se lamentó la caída de una cornisa de una propiedad en la calle Comercio, lo que ocasionó daños materiales a dos radiotaxis.
Sostuvo, que otro de los inconvenientes es que “algunos propietarios se encuentran en el exterior dejando al abandono sus viviendas, las que se van deteriorando con por el cambio de clima y el paso del tiempo”.
Pacheco manifestó, que el problema radica en el hecho que cuando se quiere notificar, se desconoce a los dueños.
“Todo arreglo de este tipo de inmueble es totalmente responsabilidad del propietario, siempre y cuando estén al día con sus tributos; el Municipio les otorga la rebaja correspondiente por Ley”, afirmó la Autoridad.
De acuerdo a la información que brindó Pacheco, se tiene un registro aproximado de 2.000 viviendas patrimoniales conjuntas y aisladas, de las cuales 1.500 se encuentran en el Centro y 500 se ubican en otros sectores como en el barrio San Sebastián, Obrajes y Sopocachi.
“La Alcaldía está imposibilitada por ley de intervenir inmuebles patrimoniales porque no puede asignar recursos públicos para reparar bienes particulares”, señaló la entrevistada.
Un ejemplo claro de la falta de conservación a bienes que datan de la Colonia y de la República, es la caída de una parte de la vivienda ubicada entre las calle Ballivián y Bolívar, en la céntrica Plaza Murillo, la edificación que data del siglo 16 está ubicada al lado del Congreso Nacional.
Por su parte, Jaqueline Cuba, una de las propietarias del inmueble declarado patrimonio cultural ubicado en la avenida Sucre frente al edificio de Identificaciones, declaró que “no realiza la refacción del inmueble porque se encuentra en juicio con varios de sus parientes, e incuso no puede levantar ni una piedra sin la autorización de los otros propietarios por el miedo de tener una contra demanda”.
“El proceso judicial es de varios años atrás y van apareciendo nuevos dueños lo que dificulta que avance el juicio, esto es muy complicado”, dijo, Cuba.
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