Verno Paco, la última persona que salió con vida del desplomado edificio Málaga, ratificó ayer la autenticidad de las fotos mostradas por el ayudante de albañil Óscar Encinas, que evidenciaban las grietas en la columna del inmueble que se derrumbó el 24 de enero del año pasado y que acabó con la vida de 14 personas.
El albañil, que consiguió salir por sus propios medios de entre los escombros, reiteró que un mes antes de la desgracia alertaron sobre las fallas en la estructura a los ingenieros y arquitectos que estaban encargados de la construcción.
Según el superviviente, las fotografías son reales, incluso el registro automático del celular establece que fueron tomadas a las 19:40 del 24 de enero de 2011, es decir pocas horas antes de que se produjera la desgracia.
Las fotografías de las columnas con rajaduras fueron mostradas el jueves por Óscar Encinas, hermano del albañil José Luis Encinas, que tomó las gráficas desde su celular antes de morir aplastado por el edificio. Óscar sobrevivió porque abandonó el inmueble en construcción minutos antes de que las columnas cedieran y se vinieran abajo.
Encinas y Paco denunciaron, cada uno por su lado, que meses antes del derrumbe advirtieron a los constructores sobre las fallas que presentaban las columnas, pero aseguran que sus reclamos no fueron escuchados por los profesionales.
Ambos supervivientes presentaron sus declaraciones en el Ministerio Público, que investiga el caso para establecer responsabilidades.
No hay comentarios:
Publicar un comentario